OJALÁ
Ojalá que en el momento en que el cordón umbilical de Javier sirva para curar a su hermano, se les seque la garganta para siempre a los que aúllan cuando se habla de Diagnóstico Genético Preimplantacional. Con su Dios, con su Obra, con su Papa se lo coman.
¡Ojalá! Y ojalá que el cordón de Javier nos dé la solución a la idiotez genética de los Bushs, Aznares y Roucos y demás calaña.
Ilusos… Para ellos el dolor redime, el trabajo dignifica y los males son justo castigo divino. Todo eso en carnes ajenas, por supuesto.
Pues que los sodomice (y de paso, que les den por el culo) un camello, que la tiene llena de arena. Así tienen un dolor (supongo) que ofrecer como sacrificio a su Dios…
Pues ya tenemos a Benedicto XVI desbarrando. Dice que Javier es fruto del egoismo y que la humanidad no puede pretender hacer de Dios. Supongo que si le ataca un cáncer lo combatirá a base de Padrenuestro. No se tomará ni una manzanilla.
Lo que no sé es que cojones hace viajando en avión, si Dios sólo le concedió la facultad de vuelo a las aves.
y luego se sienten ofendidos cunado se les califica de secta.
El también está muy egoista: quiere una bala y está pidiéndolo a gritos.
Espero que cuando a Rouco se le detecte un cáncer maligno (por ejemplo) o una gonorrea supurante, se ponga en manos de Dios y no de la pecaminosa ciencia…
[…] de él han extraído han servido para curar a su hermano. Lo que no sé es si se habrá cumplido mi segundo deseo. Pensándolo bien , y como la felicidad no es nunca completa, me conformo con el primero, que era […]